sábado, 4 de diciembre de 2010

Todos aspiramos a construir una sociedad y un mundo mejor, más allá del lugar del Hemisferio en el que nos tocó nacer", aseguró esta noche la presidenta Cristina Fernández, al encabezar la apertura de la XX Cumbre Iberoamericana, en Mar del Plata.

Cristina: "Todos aspiramos a construir un mundo mejor, más allá del lugar donde nos tocó nacer"


"Aspiro a que en esta Cumbre podamos hablar con confianza, con apertura y abordar cada una de las problemáticas que tendremos que enfrentar en este siglo XXI, sin miedo a las diferencias", agregó. "Cada uno tiene una verdad relativa que debe aportar para construir una verdad absoluta, que ayude a construir una sociedad y un mundo mejor", aseguró la mandataria.

Cristina señaló que la Cumbre se desarrolla en "un mundo diferente", luego del "desplome de los países desarrollados y el surgimiento de los países emergentes".

Argumentó que la crisis global parte de "un modelo de funcionamiento de la economía global que exige ser revisado y repensado" y ratificó la necesidad de "diseñar un nuevo modelo de arquitectura global económica, financiera y comercial, donde la asociación de los países esté basada en criterios de cooperación, de equilibrio y, también, de igualdad".

"Una de las cuestiones que ha provocado esta crisis es la ruptura de los equilibrios, el que haya habido desigualdades en el desarrollo de las sociedades y entre las regiones en materia comercial y económica, donde tenemos sociedades con grandes desequilibrios incluso aquí, en América Latina", afirmó. "Pese al crecimiento que ha tenido la región en la última década, somos sociedades con un grado de desigualdad importante", reconoció la jefa de Estado.

Recordó la Cumbre de las Américas celebrada en la misma ciudad de Mar del Plata, en 2005: "En aquel momento presidia el encuentro mi compañero Néstor Kirchner y tuvo lugar en esta ciudad un histórico debate. Si la región se incorporaba o no al ALCA, propuesta que no fue aceptada por los países latinoamericanos", reseñó.

"¿Qué hubiera pasado si perdíamos esa discusión?", cuestionó Cristina y señaló que "necesitábamos tener modelos propios de crecimiento, con más justicia, equilibrio e igualdad. Donde no se frustrara formar sociedades industrializadas, que generaran trabajo y crecimiento y que ese crecimiento pudiera ser redistribuido entre sus habitantes", explicó la Presidenta.

Cristina sostuvo que "la inclusión no se da sino en un modelo de desarrollo que genere trabajo, para que las familias puedan enviar a sus hijos al colegio" y mencionó el ejemplo del país anfitrión: "La Argentina dedicaba a la educación solo el 2% de su PBI a la educación y el 5% al pago de la deuda externa; a partir de 2003 se puso como meta llegar a destinar un 6% del PBI", detalló.

"Hoy hemos alcanzado esa meta y la hemos superado", aseguró, pues "Argentina finaliza el año del Bicentenario dedicando el 6,47% de su PBI a la educación en todos sus niveles".

"Hemos iniciado un vigoroso proyecto como el de conectar-igualdad, proveyendo a nuestros estudiantes de escuelas secundarias públicas una netbook, como un instrumento para cubrir la brecha digital", explicó.

"Al mismo tiempo, creamos la Asignación Universal por Hijo para todos los sectores que no han podido acceder a un trabajo digno, con el requisito de que envíe a su hijo al colegio, ademas del control sanitario", abundó la mandataria. "Esta inversión social ha hecho crecer muchísimo la matricula educativa", informó al auditorio.

La jefa de Estado sostuvo que todo esto "lo pudimos hacer porque hemos revertido un proceso de desindustrialización en el país" que llevaba largo tiempo y señaló la necesidad de "discutir los instrumentos para poder llegar a la educación y que sea accesible para todos".

"Estamos ante un nuevo mundo con nuevos actores, que va a exigir un esfuerzo por comprender la necesidad de nuevos sistemas de cooperación", manifestó la Presidenta y aseguró que "debemos dejar de vernos como clientes y comenzar a vernos como socios".

"Nada es indiferente"

"La globalización ha traído el hecho de que nada es indiferente, lo que pasa en una región influye en la otra", sostuvo Cristina Fernández y señaló que "América Latina tiene mucho para dar" y que "debemos capacitar a nuestros recursos humanos a través de la innovación, de la ciencia y la tecnología, que van a ser las grandes matrices de acumulación y crecimiento, junto a la otra gran demanda de este siglo, los alimentos, en la cual nuestra región esta destinada a cumplir un papel preponderante".

Finalmente, la mandataria aseguró que "el siglo XXI va a traer una paradoja, en donde la ciencia como gran valor agregado va a alcanzar niveles impensados y, por otra parte, vamos a necesitar alimentar una mayor cantidad de personas".

"Aspiro a que en esta Cumbre podamos hablar con confianza y con apertura para poder abordar cada una de estas problemáticas", expresó y pidió "no tenerle miedo a las diferencias y al debate", ya que "debemos entender que entre todos podemos construir una sociedad y un mundo mejor, más allá de cual sea el lugar del Hemisferio en el que nos tocó nacer".

La Presidenta estuvo acompañada de todos los mandatarios participantes de la Cumbre, con quienes realizó una foto grupal.