sábado, 20 de noviembre de 2010

San Pedro. La Presidenta conmemora el Día de la Soberanía Nacional



La Presidenta inaugura, a las 19, un monumento en honor a la batalla y a los soldados que participaron en la defensa del interés nacional, opuestos al avasallamiento de la flota anglo-francesa que quería navegar por los ríos del país como si la Argentina fuera su colonia.

La jefa de Estado recibirá un prendedor, representativo de la Orden de la Soberanía Nacional, que será entregado por el historiador Pacho O`Donnell, autor de un libro reciente sobre la batalla.

El broche, que será entregado a la Presidenta por el inspirador de la Comisión de la Batalla de la Vuelta de Obligado, Luis Launay, es una estrella federal de oro y con 16 piedras de rubíes, de 6 centímetros de diámetro.

El cronograma de actividades es el siguiente:

A partir de las 18, en Parque Vuelta de Obligado, San Pedro
La Banda Militar “Tambor de Tacuarí”, del Regimiento Nº 1 de Infantería Patricios y el barítono Ernesto Bauer interpretarán el Himno Nacional.

Habrá palabras de bienvenida a cargo del intendente de San Pedro Pablo Guacone.
Descubrimiento del monumento a cargo de la guardía histórica.

Por primera vez, la banda de Patricios interpretará la “Oración a los héroes de la Vuelta de Obligado”, que contiene los toques de órdenes de la batalla y seguidamente habrá veintiún salvas de honor.

Entrega de la Orden de la Soberanía Nacional a la señora Presidenta de la Nación, a cargo de Luis Launay y el historiador Pacho O´Donnel.

La conocida cantante Teresa Parodi interpretará el tema “Vuelta de Obligado”.

Palabras de la presidenta de la Nación Cristina Fernández de Kirchner.

Show pirotécnico acompañado por la marcha de San Lorenzo.

La Unidad Bicentenario de Presidencia de la Nación anunció que el acto en conmemoración de la batalla de la Vuelta de Obligado forma parte de la agenda abierta, propuesta por la Presidencia de la Nación, que incluye a todos los actores sociales, políticos y económicos.

Esta batalla debió esperar 165 años para tener su merecido homenaje. Es por eso que en este -el año del Bicentenario- la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, decidió incluir en el nuevo calendario de feriados nacionales el aniversario de la batalla de la Vuelta de Obligado enviando un proyecto al Congreso para su tratamiento.

Finalmente, el nuevo calendario quedó instaurado a través de dos decretos que se publicaron en el Boletín Oficial el 4 de noviembre, recuperando así para la memoria colectiva una fecha que simboliza una gesta relegada por la historia: la primera defensa de la soberanía que se hizo en nuestro territorio después de la independencia de España.

Ya durante los festejos de Mayo, la carroza a cargo de Fuerza Bruta que representó la batalla de la Vuelta de Obligado había sido aplaudida efusivamente por todos los presidentes latinoamericanos presentes en el desfile.

La batalla

La batalla de la Vuelta de Obligado se desarrolló el 20 de noviembre de 1845, en el paraje que da nombre al enfrentamiento, donde los patriotas cruzaron cadenas en el río Paraná para tratar de impedir el paso de la flota anglofrancesa.

El río Paraná, a la altura de San Pedro, provincia de Buenos Aires, da una curva y angosta el ancho entre las orillas, que las fuerzas del Ejército argentino usaron como ventaja comparativa para establecer un corte con las cadenas, y fijar tres baterías de artillería con las que esperaban detener la subida de las naves enemigas.

La historia cuenta que la batalla se desarrolló por más de 11 horas y que los patriotas argentinos consiguieron detener la navegación triunfal de los navíos europeos.

Según los historiadores, en la Vuelta de Obligado, las naves extranjeras quedaron tocadas y, si bien no detuvieron su andar, la resistencia argentina logró insuflar la resistencia en el pueblo.

Los historiadores dan cuenta que las pérdidas sufridas por la flota enemiga dio ánimo a los patriotas y quebró el espíritu triunfalista de los invasores, que querían imponer el comercio de sus productos en el interior del país.

"Si pierden plata, están derrotados", aseguran algunos historiadores que le dijo Juan Manuel de Rosas al general Lucio Norberto Mansilla, jefe del Ejército.

La flota anglofrancesa era la punta de lanza de 95 navíos de carga, repletos de productos para ser colocados en la provincia de Corrientes y en el Paraguay.

Durante la batalla, las naves de carga permanecieron en Ibicuy expectantes del desarrollo de la contienda.

La batalla de la Vuelta de Obligado fue la primera de otros tres enfrentamientos, como fueron el paraje Tonelero el 9 de enero de 1846, una semana más tarde San Lorenzo (donde el general José de San Martín había derrotado a los españoles con los Granaderos) y por último Quebracho, sitio donde los patriotas cañonearon a los invasores.

La presidenta Fernández de Kirchner alentó desde un primer momento la construcción del monumento en homenaje a la gesta militar argentina y ordenó financiar la obra, cuyo autor es el plástico Rogelio Polosello.

La obra de Polosello estará ubicada a unos 30 metros del panteón que recuerda a los héroes, que hasta no hace mucho se encontraba descuidado.

Por esta acción que condujo el entonces gobernador de la provincia de Buenos Aires, Juan Manuel de Rosas, el libertador San Martín le legó su preciado sable corvo.

De acuerdo con los principales historiadores, Rosas murió en Southampton, Inglaterra, en 1877 y sobre su ferétro estaba el sable de San Martín y la bandera azul turquí que había ondeado durante la batalla de Caseros, que fue su Waterloo.

Rosas había designado al general Mansilla, que era su cuñado, como el jefe del Ejército argentino que protagonizó la batalla de Obligado, quien fue herido en acción y pese a ello continuó al frente de las tropas.